Cuando nos regresaron al cuarto, la mayoría de los presentes comenzó a suplicar y a rezar por sus vidas. Era un momento de desesperación y claro, los entendía, acabábamos de ver como mataron gente a sangre fría con disparos que sonaban como ecos en mi cabeza. Cada uno intentaba aferrarse a la esperanza de que sus súplicas fueran escuchadas. Fue en ese preciso instante cuando el jugador 456 habló de nuevo, su voz resonando con determinación.

—"Cláusula 3, si los jugadores lo desean, se realizará una votación que definirá si los juegos se acaban aquí mismo o continuarán. ¿No es correcto?"

—"Es correcto. Pues entonces que inicie la votación."

Pasó un tiempo que pareció eterno, mientras las personas se movían nerviosamente, votando y dividiéndose en círculos o equis. El jugador 456 fue el primero en votar, y por obvias razones, su elección fue en contra de continuar. Yo ya había tomado la decisión de votar en contra, consciente de que continuar significaría un riesgo mortal. Así, los turnos avanzaron lentamente, hasta que escuché el nombre "Jugador 388". Observé cómo el chico que me había defendido caminaba con paso firme hacia los botones, mostrándose decidido. Ahora conocía su número también. En ese momento, me di cuenta de que no le había prestado mucha atención antes; estaba más enfocada en agradecerle que en recordar su número.

Cuando escuché que nombraron al 230, me di cuenta de que era Thanos. El chico presionó la O. Su actitud me pareció enfermiza porque fue saltando y festejando como si toda esta situación fuera una gran fiesta . Fue en ese instante que el 456, visiblemente agitado, se interpuso entre nosotros y gritó con una intensidad que hizo eco en la habitación.

—"¡Todos esperen un minuto, solo un minuto, por favor! ¡No pueden hacer esto, vuelvan a sus sentidos! ¿No lo pueden ver? No son juegos cualquiera, ¡moriremos si seguimos jugando! ¡Podemos salir de aquí ahora! Si ganamos en votos, podremos irnos a casa!"

Un hombre del grupo O, visiblemente frustrado, respondió con desdén.

—"¿Y tú quién te crees? ¿Por qué sigues espantando a la gente así? ¡Nos asustaste diciendo que nos dispararían antes de que el juego comenzara!"

Una mujer, también indignada, se unió a la discusión.

—"Eso es verdad. ¿Cómo sabías que esto pasaría, eh? ¡Trabajas para ellos, no es así?"

La tensión en la habitación creció, y la gente comenzó a discutir frenéticamente, algunos exclamando que deberíamos irnos a casa, mientras que otros insistían en que los juegos debían continuar. Fue en ese momento que vi al 456 de nuevo. Se notaba visiblemente agitado y ansioso, vi como se agarraba la cabeza con desesperación, antes de gritar.

—"¡YO YA ESTUVE EN ESTOS JUEGOS! (🗣️‼️🗣️‼️🗣️‼️) ¡Supe del primer juego porque ya lo he jugado antes! Jugué los juegos hace tres años, y todos los que estaban conmigo murieron ante mis ojos. Si continuamos con los juegos, todos en esta habitación morirán también!"

El clamor de la multitud aumentó, y muchos gritaban que deberíamos continuar. El 456, desesperado, se acercó a aquellos que aún no habían votado, intentando convencerlos de que si seguíamos, todos moriríamos. Fue entonces cuando un soldado apuntó su arma en su espalda.

—"De ahora en adelante, no toleraremos actos que interfieran con el proceso de voto. Ahora, resumiremos el proceso de voto."

Después de muchos votos, llegó mi turno. Escuché "Jugadora 003" y, con un paso lento y decidido, caminé hacia los botones y presioné la X. Deseando con todas mis fuerzas salir lo más pronto posible. No quería seguir en este infierno.

Finalmente, fue el turno del jugador 001. Mientras se dirigia a los botones lentamente todos apoyaban a su respectivo bando, gritando 'O' o 'X', y al llegar a los botones, un silencio sepulcral se apoderó de la sala. La pantalla cambió de 182 a 183... del lado azul. Seguíamos estancados aquí.

Después del infierno que nos hicieron pasar en la votación, nos dieron de comer. Observé cómo el jugador 388 se acercaba a donde estaba el 456, presentándose como Kang Dae-Ho. Dae-Ho... era un nombre lindo, perfecto para él. No estaba muy lejos, así que alcancé a escuchar toda su conversación. Luego vi que el jugador 390 le levantaba la camisa a Dae-Ho en la parte del brazo izquierdo. Por lo visto, había estado en la Marina. El 390 se levantó la camisa igualmente y mostró un tatuaje, eran iguales.

— "¡Victoria a cualquier costo! ¡Estuve en la Clase 1140, señor, sí señor!"

—"Dae-Ho. Sabía que tenías algo, muchacho." Dijo mientras le daba un golpecito en el hombro.

—"¡Señor, sí señor!"

—"Clase 746. Hagamos un buen equipo."

—"¡No lo defraudaré!"

El jugador 390 le seguía dando golpecitos en los hombros mientras Dae-Ho continuaba gritando con entusiasmo. No pude evitar soltar una risita al escuchar sus gritos de orden. Vi que Dae-Ho se giró hacia mi dirección, me vio y noté que sus mejillas se sonrojaron levemente, mientras intentaba contener una pequeña sonrisa. Era muy lindo. Le devolví la sonrisa y se volteó con vergüenza. Qué tierno.

Un rato después, vi que tres hombres comenzaron a pelear. Era Thanos, su amigo y el youtuber, el 333. Lo tiraron al suelo y le daban patadas y golpes entre los dos. Desde la distancia, observé cómo el jugador 001 se acercaba a ellos, pidiéndoles que pararan, argumentando que era de mala educación con gente mayor observando. Thanos se puso a la defensiva y comenzó a insultarlo. El jugador 001 lo agarró del cuello y a su amigo le dio una patada rápida, tirándolo al suelo. Thanos intentó golpearlo, pero el 001 era más rápido, le torció el brazo y lo sometió al suelo. Vaya que, para su edad, era muy fuerte; le calculé alrededor de unos 40 años. Thanos pidió piedad, y el 001 lo dejó ir. Mientras todos lo felicitaban por su acto de heroísmo al defender al 333.

Llegó la noche y apagaron las luces, dejando solo la luz de la alcancía iluminando tenuemente la habitación. Antes de acostarme, observé hacia unas camas más abajo. Vi a Dae-Ho acostado y tapándose, se veía tan lindo incluso dormido. Espera, ¿Qué cosas estoy diciendo? Lo conocí una sola vez, por Dios, ¿Qué me pasa?

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Al día siguiente, la música volvió a sonar. Maldita sea, qué molesta es. Esa melodía repetitiva resonaba en mis oídos, como un recordatorio constante de la situación en la que me encontraba. Las luces se encendieron y todos nos levantamos, aún aturdidos por la noche anterior. La mujer del PA anunció que el segundo juego comenzaría pronto y pidió que siguiéramos al staff.  Finalmente, llegamos al segundo juego, que se desarrollaría en una cancha de tierra grande, igual que la anterior, pero había dos círculos de arcoíris en el centro de ella. La vista era surrealista. La voz del PA volvió a resonar en la habitación.

—"Bienvenidos a su segundo juego. Este juego se jugará en equipos. Por favor, divídanse en equipos de cinco en los siguientes diez minutos."

La presión aumentaba. No había hablado con nadie hasta el momento, salvo con Dae-Ho y Thanos. Cuando empecé a buscar a Dae-Ho, me di cuenta de que ya tenía equipo. La decepción me golpeó, pero no podía quedarme ahí estancada. Busqué y busqué, observando los rostros de las personas a mi alrededor, cada uno reflejando la misma mezcla de miedo y ansiedad que estaba sintiendo yo también. Finalmente, me uní a un grupo cualquiera que estaba disponible. Al menos eran hombres y mujeres por igual, así que, si se trataba de un juego de fuerza o de estrategia, teníamos una buena oportunidad.

Los diez minutos en el reloj llegaron a cero, y el PA anunció...